Tres canciones, 251

La elección de Withor

CHET BAKER – ALMOST BLUE

Llevaba semanas con ganas de recomendar ‘Almost blue’, del gran Chet Baker, pero me resultaba imposible acertar con la tecla adecuada. Ya saben que este juego de la recomendación que nos hemos autoimpuesto va más allá del mero consejo. La clave, la salsa que aliña estas pocas líneas, se encuentra en la justificación.

En un primer momento pensé en partir de una anécdota que tuvo lugar en mi puesto de trabajo. Sonaba ‘Almost blue’ y mi cabeza estaba muy lejos de la oficina, hasta que uno de mis compañeros (con buena fe) recriminó mi elección musical, bajo el pretexto de que era viernes al mediodía y que esa canción no era la indicada para un momento de júbilo y éxtasis como es la llegada inminente del fin de semana. Aquel viernes acabó sonando un popurrí de canciones de los 80 hasta que me salvó la campana.

Después pensé en basar mi recomendación en la literatura. Barajé diferentes ideas: utilizar (de nuevo) la figura de Cortázar como excusa, su amor por esta música y la idea de ‘Rayuela’ como una gran pieza improvisada de jazz. Tanteé la manida opción de escribir sobre lo difícil que es escribir sobre jazz, hasta que descubrí a un autor que aseguraba que es imposible, porque con la herramienta de las palabras jamás se podrá captar el mismo espíritu de libertad. En ese punto decidí desistir, recordando la célebre frase de Zappa: «Escribir sobre música es como bailar sobre arquitectura«.

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Finalmente, consideré que lo más adecuado sería justificar la recomendación a través de su autor. No era difícil. Ahí están las múltiples anécdotas de Baker, una vida llena de momentos oscuros a los que es difícil resistirse (de hecho, me salivaron un poco los colmillos). Podía explicar los primeros 15 minutos de ‘Let’s get lost’, documental sobre su vida cuya primera escena es un tesoro: Baker, completamente ido y demacrado, en otro universo situado a años luz del nuestro, intenta hablar sin éxito con dos jovencitas italianas con las que incomprensiblemente había conseguido ligar.

Pero al final decidí que ‘Almost blue’ es tan buena que, por una vez, lo más indicado es no buscar ninguna justificación.